Utopía y Praxis Latinoamericana - Vol. 25 - Núm. 89
Utopía y Praxis Latinoamericana; ISSN 1316-5216; ISSN-e 2477-9555 Año 25, n° 89 (abril-junio), 2020, pp. 227-238 235 racionales que no se pueden ni deben dejar de lado mientras le sirvan de apoyo. Uno solo puede sentirse seguro cuando la colisión de deberes se resuelve, por así decir, por sí misma y uno se convierte en la víctima de una decisión tomada fuera de nuestra cabeza y nuestro corazón. Ahí se manifiesta la fortaleza numinosa del sí-mismo, que de otra manera apenas se puede experimentar. Por eso, la vivencia del sí-mismo significa una derrota del yo (Jung: 2002, pp. 521-2). La derrota del yo en la relación terapéutica de la medicina tradicional Misak, es una de las inquietudes que quedan para próximas investigaciones, sin embargo, permite comprender la posición de obediencia de parte del mørøpik hacia las orientaciones que el “don” hace y que según la expresión del médico Manuel Julio, habla a través de sueños por las noches o como visión en el día. El entramado entre los saberes Misak y las reflexiones de Jung respecto al sí-mismo, es trabajado a partir de las pinturas del mørøpik Juan Bautista Ussa Ulluné. Al estudiar las pinturas de Juan Bautista se identifican aportes en términos de la medicina tradicional y la forma de gobierno, desde el relacionamiento entre los sueños, la sabiduría ancestral, la pintura, la piedra de rayo y el yash (planta que representa el espíritu del páramo-laguna. En la botánica se clasifica en las Brugmancias). El mørøpik relata el momento en que el Pishimisak le da permiso de soñar usando la “piedra de rayo”: (…) esa piedra es como la enseñanza, el consejo, ella ha sido mi maestra. Yo le consulto cualquier problema, el que sea, y ella me habla. Yo antes no sabía lo que iba a ser y fue ella la que me hizo pintor; por eso, cuando voy a pintar, siempre está ahí juntico, porque sin ella es como si no tuviera lápiz cuando está a un lado, ahí sí comienza a salir el dibujo que voy pensando (Vasco: s.f. , p. 9). El material onírico en la medicina tradicional Misak es fuente de saberes ancestrales y también las visiones que en estado vigilia contempla el mørøpik . Sueños y visiones se entrelazan en el pensamiento Misak, de allí que el médico utilice distintas estrategias para aprender las voces de los ancestros mientras está dormido o está despierto. Esta manera de pensar fue grabada en piedras en la Vereda El Tranal en forma de doble espiral (petroglifos) por los antiguos Wampias , puesto que es un pensamiento cuyo movimiento camina del enrollar al desenrollar y vuelve a caminar. La doble espiral la encontramos en el sombrero tradicional pøtøkwari (plegado que se redondea desde la memoria ancestral) que representa la forma del mundo Misak; en las pinturas de Juan Bautista Ussa la observamos en el Køsrøpøtø (el aroiris), un ser de la naturaleza con la propiedad de fecundar las lagunas Piendamó y Ñimbe de las que “vienen” los piurek o hijos del agua . El Køsrømpøtø camina por el territorio redondeando la palabra, tejiendo el espacio-tiempo y dando consejo en el Nakchak; e stá presente al enseñar las plantas medicinales en el páramo, en el tejido de la indumentaria y al escuchar la palabra de mayoras y mayores alrededor del fogón. En tiempos de Colonización evangelizadora y de terrajería, cuando ya quedaban pocas fuerzas para salvaguardar el pensamiento, se tejía alrededor del fogón familiar la “Autonomía Plena Misak” (El Derecho Mayor: 2014, p. 10). El médico Manuel Julio dice que Nakchak es escenario de educación propia porque allí se entierra el ombligo y la placenta que quedan del parto, para enraizar la vida del ser Misak y así poder caminar y desenrollar la espiral; y cuando las raíces llamen desde el fogón, redondea y trabaja en enrollar la espiral para volver a recibir consejo en territorio (Conversaciones: 2017). En el fogón pervive el pensamiento Misak y se conduce en relación a cuatro contenidos políticos que expone El Derecho Mayor. El pensamiento Misak está en los encuentros que los hijos del agua realizan alrededor del fogón, donde se cultiva en memoria de los ancestros, saberes sobre 1. Nupirau que enseñan a vivir en armonía con el territorio, con los seres de la naturaleza y con las personas; saberes sobre 2. Latá-Latá, que conducen los comportamientos de las personas según leyes de la naturaleza, útiles para la convivencia que enseñan las autoridades y que potencian la circulación de la vida en escenarios de pluralismos jurídicos; saberes sobre
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