Un siglo de intervención de EEUU en Bolivia
247 jetivo hecho a la medida de las ilusiones de EEUU: “coca cero”. 54 Así, aun provocando un auténtico incendio social en el Chapare, Banzer recibió el aplauso norteamericano. El 18 de junio de 1998, luego de que se registraran 15 muertes (entre cocaleros y policías) en el Chapare, a consecuencia de la erradicación forzosa, la embaja- dora de EEUU en Bolivia, Donna Hrinak, lamentaba la pérdida de vidas humanas y felicitaba a Bolivia por el avance y el éxito del Plan Dignidad y reiteraba el apoyo de su país a la lucha contra las drogas. Del mismo modo, el 7 de junio de 2000, Hrinak felicitaba al ex- dictador por la erradicación de 30 mil hectáreas de coca ilegal en los 34 meses transcurridos desde que se inició su gestión, al tiempo que anunciaba la plena “certificación” 55 de Bolivia en esta materia. En esta misma línea, en agosto de 2000, el embajador de EEUU en Bolivia, Manuel Rocha, destacaba el éxito del Plan Dignidad y declaraba: “Espero ser el embajador de Estados Unidos que arran- que la última planta de coca en Bolivia”. Aunque éste no fue más que un delirio de un embajador que pasaría a la historia por ha- ber pedido el voto en contra de Evo Morales en las previas a las elecciones generales de 2002, lo cierto es que la ejecución del Plan Dignidad dejó un gran número de muertos y heridos en el Chapare. El 23 de septiembre de 2000, era el mismo embajador Rocha quien 54 Cabe señalar, que Banzer “sobrepasó” las exigencias de los propios nortea- me- ricanos en materia de lucha contra las drogas. El 2 de agosto de 1997, tan sólo cuatro días antes de la investidura presidencial de Hugo Banzer, el Depar- tamento de Estado hizo conocer cuáles eran las condiciones que debía cumplir el nuevo Gobierno hasta diciembre de 1997 para obtener la certificación plena anual: 1) Erradicar el 10% de la coca madura existente; 2) Cumplir la Ley del Régimen de la Coca y Sustancias Controladas; 3) Aprobar el Nuevo Código de Procedimiento Penal; 4) Establecer el Tribunal Constitucional; y 5) Constituir el Consejo de la Judicatura. 55 La “certificación” o “descertificación” en la lucha antidrogas fue un meca- nismo ingeniado y aplicado discrecional y unilateralmente por Estados Unidos, de forma global, para aprobar o desaprobar el cumplimiento de sus objetivos en esta materia. Mediante este mecanismo, se premia o se penaliza, anualmen- te, a los distintos países vinculados con la producción de narcóticos en base a criterios que, las más de las veces, son políticos y no técnicos.
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