El Vuelo del Fénix
EL VUELO DEL FÉNIX 416 RL: Si uds separan modernidad y capitalismo, entonces, también colo- can a Marx como un pensador moderno. Sin embargo, hay una tradi- ción de pensamiento conocida como decolonialidad que sostiene, preci- samente, la unidad entre modernidad y capitalismo, inclusive, la crisis del capital sería la crisis de la civilización moderna. Ahora, ¿cómo sos- tienen uds esta separación entre modernidad y capitalismo y la lectura de un Marx ilustrado? CFL: Tienes razón, eso es lo que hacemos. Llamamos modernidad a ese momento histórico en el que triunfó el republicanismo. El repu- blicanismo es una cosa muy vieja, de los tiempos de Roma, pero en el momento que parece que triunfa políticamente ese proyecto es el mo- mento en que triunfa la Revolución Francesa, la Norteamericana y la Británica, a las revoluciones que normalmente la tradición marxista denominó revoluciones burguesas. Claro pero como consideramos que esas revoluciones no fueron revoluciones burguesas, es que deci- mos que el triunfo del capitalismo no es el triunfo de la modernidad. Es más, el capitalismo triunfó contra la modernidad. Y de hecho la prueba de que tenemos razón –porque yo creo que la tenemos, aun- que sea un poco obvio decirlo–, es lo que está pasando. Cada vez más se está regresando a la edad media, estamos retrocediendo. El capi- talismo salvaje nos está haciendo regresar a la Edad Media. Es decir, los poderes ya no son poderes públicos, ya no son poderes estatales, los Estados ya no pintan nada, ¿qué pinta un parlamento? Nada. Si el parlamente está cogido de pies y manos, está agarrado, esposado, por los poderes económicos. Si en Europa no podemos mover un dedo sin que nos digan que sube la prima de riesgo y que tenemos que cambiar esa ley. Los tratados de libre comercio internacionales, tratados supra- estatales que hacen que el poder político, el poder parlamentario, el poder ilustrado, público, el poder de lo público no tenga nada que ha- cer. Las universidades públicas están siendo colonizadas por las uni- versidades privadas enteramente. Yo soy profesor de una universidad, mi universidad se cae a cachos. Están entrando las empresas priva- das, todo lo que era discusión pública en la universidad están siendo sustituidas por negociaciones secretas de grupos empresariales, que deciden qué departamento sirve y qué departamento es rentable, es una vuelta a la Edad Media. Es el fin de lo público y el dominio de lo privado. Ahora lo privado ya no son señores feudales, ahora son gran- des corporaciones económicas, pero son mucho más peligrosos que los señores feudales, tiene muchos más poder de destrucción. Además nunca ningún señor feudal tuvo el poder que tienen las corporaciones económicas actualmente.
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