El Vuelo del Fénix
EL VUELO DEL FÉNIX 130 crítica a los sistemas de dominación, hacía un constante uso de la categoría de pueblo 6 , especialmente en su Ética de la liberación lati- noamericana. En ese entonces no hacía él uso del concepto de clase social, proletariado o clase obrera, como el sujeto de la crítica o la revolución, el cual era supuestamente central a la hora de querer ha- cer pensamiento crítico. A partir de esta crítica, el problema que se planteaba a sí mismo era que: o su pensamiento no es radicalmente crítico y entonces es ingenuo, o sino, que todo lo que había construi- do teórica y filosóficamente hasta ese entonces era meramente ideo- lógico y no así científico. La única forma de responder a tan fuerte crítica fue apropiándose del lenguaje, los conceptos y categorías al interior de las cuales apa- rece el concepto de clase o clase obrera como críticas y científicas, y a su vez el concepto de pueblo o lo popular como ideológico y acrítico. Dussel por ese entonces ya era filósofo, y como tal se puso a estudiar el problema en sus fuentes y no en los meros estudios introductorios o de divulgación que por ese entonces abundaban de tal manera que mucha gente después de leer uno de estos manuales, ya se sentía au- téntico conocedor de Marx. Y así fue entonces que Dussel se puso a estudiar a fondo a Marx, no sólo para comprender el sentido de las objeciones, sino también para responder a esas críticas que le hacían por un lado los marxistas y por el otro los latinoamericanistas. Cuando un pensador piensa de cara y de frente a la realidad, siempre dialoga con los grandes pensadores, siempre los tiene como interlocutores a partir de los cuales se construye y se afinan categorías para expresar del mejor modo posible, categorialmente hablando, a la realidad que se está pensando, que en este caso era la miseria del pue- 6 Acá podemos notar otro déficit epistemológico típico de la intelectualidad lati- noamericana, al confundir un concepto o categoría con la cosa nombrada (¿sustan- cialismo?). Como si un concepto reflejara solamente una realidad y no otra, como si la realidad no fuese capaz de cambiar, como si la realidad fuese siempre idéntica a sí misma a pesar de la historia y la cultura. Porque el pueblo europeo no es el mismo pueblo que el latinoamericano, y por eso mismo la categoría pueblo, no puede tener el mismo significado, o contenido cuando se hace uso de la categoría pueblo en Euro- pa que en Latinoamérica. Si por tales o cuales motivos el pueblo europeo, o italiano, o alemán actuó de modo irracional en un momento de la historia, eso no quiere decir que, ergo , o entonces, todo pueblo siempre va a actuar de modo irracional. Cada pue- blo actúa de acuerdo a su propia historia, en el contexto de la macro historia y la cul- tura, por ello es que ningún concepto o categoría de pueblo, puede agotar todos los modos o formas de ser del pueblo , por ello es que siempre se puede pensar al pueblo o lo popular de distintos modos, sin necesidad de caer en los “ismos”. Porque todos los pueblos por más identidad que tengan respecto de sí mismos, siempre pueden cam- biar en el devenir de la historia y por eso es que el pensador siempre tiene que estar dispuesto a cambiar el contenido del concepto pueblo, para explicar la especificidad histórica de los pueblos en la historia.
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