1917

329 Mandato campesino acerca de la tierra 8 El problema de la tierra solo puede ser resuelto en todo su volumen por la Asamblea Constituyente de todo el pueblo. La solución más justa del problema de la tierra debe ser la siguiente: 1. Queda abolido para siempre el derecho de la propiedad privada sobre la tierra ; la tierra no puede ser vendida, comprada, arrendada, hipotecada o enajenada en ninguna otra forma. Todas las tierras del Estado, de la Corona, del zar, de los con- ventos, de la Iglesia, de las posesiones, de los mayorazgos 9 , de propiedad privada, de las comunidades y de los campesinos, etc., son enajenadas sin indemnización , se convierten en patrimonio de todo el pueblo y pasan en usufructo a todos los que las trabajan. A los damnificados por esta transformación del régimen de propiedad no se les reconoce más derecho que el de recibir un so- corro de la sociedad durante el tiempo necesario para adaptarse a las nuevas condiciones de existencia. 2. Todas las riquezas del subsuelo —minerales, petróleo, carbón, sal, etc.—, así como los bosques y las aguas de importancia nacional, serán usufructuadas con carácter exclusivo por el Estado. Todos los pequeños ríos, lagos, bosques, etc., pasan en usufructo a las comunidades, a condición de que sean explotados por los organismos de administración local. 3. Las tierras con haciendas de alto nivel técnico : huertos, planta- ciones, semilleros, viveros, invernaderos, etc., no serán repartidas, sino convertidas en haciendas modelo y transferidas en usufructo exclusivo al Estado o a las comunidades , según su extensión e importancia. 8 Publicado en Izvestia el 28 de octubre (10 de noviembre). 9 Tierras de la corona y de la familia imperial: tierras que pertenecían al zar y sus familiares. Tierras de posesión: tierras cedidas por el Estado a los propietarios de las fábricas para que las entregaran en usufructo a los campesinos que trabajaban en dichas fábricas percibiendo únicamente como retribución de su trabajo las parcelas de tierra. Tierras de los mayorazgos: grandes latifundios que pasaban íntegramente de generación en generación, como herencia, al hijo mayor o al más viejo de la familia.

RkJQdWJsaXNoZXIy MTA3MTQ=